Goleta 'My Bubu': Sur del Mar Tirreno

Registro disponible a partir de las 17:00 en el puerto de embarque. Tras el registro técnico y una breve presentación del barco, podrá ocupar su lugar en los camarotes y embarcar en la cocina antes de zarpar.

Salimos de Portorosa navegando hacia el norte, hacia la hermosa isla de Lipari. Con una superficie de 37 kilómetros cuadrados, esta isla, modelada a lo largo de los siglos por no menos de 12 volcanes, es la mayor de todas las Eolias y se encuentra a unos 20 m de la costa de Sicilia. Montañosa y escarpada, muestra su naturaleza volcánica a lo largo de sus costas, donde se suceden profundas cuevas, pintorescas playas y amplias bahías rodeadas de rojos acantilados y blancas coladas de piedra pómez. Puede parar a darse un chapuzón cerca de las hermosas calas de Portinente, Vinci, Punta del Perciato o la playa secreta de Acquacalda. Porto Pignataro y la playa de Marina Lunga serán un excelente lugar de desembarco para pasar la noche.

Zarpamos de Lipari, navegando hacia el norte para llegar a Stromboli. El volcán del que procede la isla es uno de los seis únicos volcanes del mundo que están "constantemente" en erupción. El litoral de la isla está repleto de cuevas y bahías con amplias playas de arena negra, así como de pequeñas calas solitarias donde detenerse a darse un chapuzón en las aguas cristalinas de mil tonalidades de azul. El pequeño pueblo cercano a la arenosa Punta Lena merece sin duda una visita.

Después del desayuno, levamos anclas hacia el suroeste en dirección a Salina. Esta isla, con altos acantilados que se precipitan en un mar azul, es la más verde de todas las Eolias, cubierta de helechos, olivos y árboles frutales. Puede atracar en el hermoso puerto de Santa Marina y desembarcar para visitar la bonita ciudad con su maravillosa iglesia del siglo XVIII y sus característicos campanarios. Esta será la oportunidad perfecta para disfrutar de una cena en tierra y saborear la sabrosa cocina local.

Zarpamos temprano por la mañana desde Santa Marina para hacer una parada al norte de Salina. La pintoresca bahía de Pollara, con su hermosa playa y sus deshabitadas casitas de pescadores, es una imagen de postal que no debe perderse. Tras el almuerzo, zarpará de nuevo hacia el este, hacia Panarea. Aguas cristalinas, pintorescos acantilados y encantadores fondos marinos le esperan aquí, lo que convierte a esta isla en un destino popular para buceadores y submarinistas. Puede echar el ancla en Cala Junco, uno de los puertos más emocionantes de las Islas Eolias, y desembarcar para realizar una excursión a las ruinas de un antiguo pueblo prehistórico.

Desde Panarea se echa el ancla para navegar por la mañana hacia el oeste, hacia la isla de Filicudi. Enseguida le encantará su hermoso litoral, en el que se alternan escarpados acantilados y peñascos con hermosas playas llanas, como la de Capo Graziano. Con la embarcación se pueden explorar las numerosas cuevas, la más famosa de las cuales es sin duda la cueva del Bue Marino, con su increíble fondo azul cristalino.

El desembarco está previsto para las 09:00 horas del sábado.

Registro disponible a partir de las 17:00 en el puerto de embarque. Tras el registro técnico y una breve presentación del barco, podrá ocupar su lugar en los camarotes y embarcar en la cocina antes de zarpar.

Desde Salerno se navega por la costa hacia la ciudad de Amalfi. A lo largo del trayecto podrá parar a almorzar anclado en una de las hermosas calas a las que sólo se puede acceder por mar o detenerse a darse un chapuzón cerca de las playas más famosas y animadas de la Costa Amalfitana. Le sugerimos que baje a tierra para visitar el encantador pueblo costero de Amalfi, rico en encanto e historia y con maravillas arquitectónicas inigualables.

Saldrá de Amalfi a primera hora de la mañana para navegar por la costa hasta la famosa isla de Capri. Un panorama único se despliega ante su proa: la isla azul que se alza elegante y llamativa frente a la bahía de Nápoles. Le encantará su seductora belleza, su exuberante costa, sus altos acantilados, sus playas escondidas, sus gigantescos acantilados y la imperdible Gruta Azul, todo ello en un mar cristalino de extraordinaria belleza. Imposible no desembarcar y entrar en la animada Piazzetta justo a tiempo para tomar un aperitivo.

Desde Capri partimos hacia una de las islas más bellas y características del archipiélago de los Flegrei: Procida. Tiempo para tomar el sol y relajarse en una de las hermosas bahías para llegar al antiguo puerto pesquero de Chiaiolella antes de la puesta de sol. Aquí encontrará un lugar con una atmósfera mágica y romántica y será la oportunidad perfecta para comer en tierra y disfrutar de platos de pescado fresco en uno de los muchos pequeños restaurantes que hay a lo largo del paseo marítimo.

Tras el desayuno, zarpamos para circunnavegar la cercana isla de Ischia. Con sus 18 millas de playas, bahías y calas, su exuberante vegetación y sus famosas aguas termales, Ischia es la mayor de las islas del archipiélago napolitano y no por nada se la llama "el jardín de Europa". No hay que perderse una inmersión en la hermosa bahía de San Pancrazio o en la sugestiva bahía de la playa "Scarrupata", accesible sólo por mar. Al oeste del istmo de Sant'Angelo se encuentra la bahía de Sorgeto, cuyos manantiales de agua caliente le proporcionarán el bienestar de un auténtico baño termal.

Desde Ischia navegará hacia el sur en dirección a Sorrento. Esta mágica ciudad situada en un afloramiento rocoso de 50 metros de altura es una auténtica terraza sobre el mar, desde la que se puede admirar todo el Golfo, desde Nápoles a Capri, hasta la inconfundible silueta del Vesubio al este. Los puntos fuertes de la ciudad son sin duda su belleza arquitectónica y sus impresionantes vistas, sin olvidar su rica tradición culinaria. Una cena de ñoquis a la sorrentina y sepia rellena es imprescindible.

Después de desayunar, navegará hacia el sur a su aire. Después de pasar por Punta Campanella se puede parar el ancla para darse un chapuzón y comer con total tranquilidad. Por la tarde se dirigirá a la ciudad de moda de Positano, que le encantará por su arquitectura típicamente mediterránea, las callejuelas del centro con sus bonitas tiendas de artesanía y los pequeños comercios donde podrá comprar los típicos dulces de limón y licores. Paseando por el histórico pueblo podrá recorrer las características escaleras y admirar la encantadora vista de la bahía. Regreso a la Marina a las 18:00 horas con pernocta en el puerto incluida.

El desembarco está previsto para las 09:00 horas del sábado. 

Registro disponible a partir de las 17:00 en el puerto de embarque. Tras el registro técnico y una breve presentación del barco, podrá ocupar su lugar en los camarotes y cargar la cocina antes de zarpar. La cena puede prepararse a bordo o en un restaurante típico en el paseo marítimo de Marsala, y luego podemos visitar el característico centro histórico de la ciudad. Pasaremos la noche en el puerto.

Por la mañana partimos hacia Favignana y desembarcamos en una de sus encantadoras calas: un baño en sus aguas azules, almuerzo a bordo, y ya está listo para atracar en el puerto. Favignana es la isla con forma de mariposa, lugar de desembarco del mítico Ulises donde todo remite al mar: las antiguas tradiciones vinculadas a la pesca del atún la convierten en un destino muy solicitado por los aficionados a este pescado. Una inmersión al atardecer en la isla y una cena bajo las estrellas son el colofón de un día tan mágico como la tierra que nos acoge.

Hoy navegaremos hasta Favignana para disfrutar de su encantador mar: cielo, mar y tierra se unen en un paisaje inolvidable. Un aperitivo en el barco con buena música acompañará otra velada con nuestros nuevos amigos.

Por la mañana echamos el ancla y navegamos hacia Levanzo, la más pequeña y salvaje de las islas Egadi. Aquí no hay carreteras ni coches y los aromas del maquis mediterráneo son tan intensos que dejan una huella indeleble en sus visitantes, ideal para los amantes del senderismo. Velada en barco acompañada de un buen vino siciliano que encierra todas las fragancias de esta tierra.

Alójese en Levanzo, fondeado, para darse sugerentes baños en la tranquilidad de una playa desierta y admirar los peces que pueblan la costa: el azul del mar nunca le parecerá tan intenso. En la cena, podrá disfrutar de las especialidades culinarias de la isla.

Por la mañana zarpamos hacia Marettimo, una isla verde, rica en manantiales y espectaculares cuevas marinas. Marettimo está coronado por una alta montaña con rocas muy similares a las Dolomitas, con vistas a un profundo mar turquesa, no muy lejos, dos imponentes rocas: Maraone y Formica. Los aficionados al buceo podrán explorar las innumerables cavidades marinas que rodean este paraíso. Después de un intenso día en el mar, un fresco aperitivo todos juntos admirando la puesta de sol mientras se espera la cena en el puerto es justo lo que se necesita. La noche estará marcada por la música en La Scaletta, un club de ambiente típicamente marinero, con vistas al puerto.

El último día de navegación, navegamos hacia Marsala para pasar la noche en el puerto. La cena a bordo o en un restaurante frente al mar pone el broche de oro a la semana: un brindis de despedida por los nuevos amigos y el espléndido mar, sofocando la tristeza de haber terminado esta aventura egabrense. Regreso a la Marina a las 18:00 horas con pernocta en puerto incluida.

El desembarco está previsto para las 09:00 horas del sábado.